Estimado papá:
Tú tienes un papel importante en el desarrollo del cuerpo y la mente de tu hijo.
Ya sea que veas a tu hijo a diario o que vivas en un hogar diferente, ser parte activa de la vida de tu hijo marca una gran diferencia. Si estás presente y participas, lo ayudarás a crecer y convertirse en un niño y un adulto más feliz y exitoso.
La calidad del tiempo que pasas con tu hijo es más importante que la cantidad de horas que pasas con él. La calidad de su relación tiene un efecto directo en el sentimiento de autovalía de tu hijo.
Los niños que crecen con un padre que participa tienen:
un39%
más probabilidades de obtener notas excelentes en la escuela
2x
2x
dos veces más probabilidades de ir a la universidad y encontrar un trabajo estable después de la escuela secundaria
No te compares con tu papá ni con otros papás que conozcas. ¡Tu hijo te admira a ti!
Ayúdame a aprender
Los niños aprenden mirando a sus padres. Los niños que tienen un padre que participa activamente en su aprendizaje diario tienen más probabilidades de lo siguiente:
-
Estar listos para
empezar la escuela. - Resolver problemas
-
Ser más amistosos
con otras personas.
Un padre es el primer maestro de un niño. Es posible que no te des cuenta, pero le estás enseñando a tu hijo mediante las cosas simples que haces a diario.
Puedes ayudar a tu hijo a aprender de las siguientes maneras:
- Hablando sobre el mundo que te rodea y las cosas que haces cada día.
- Señalando y diciendo los colores, los sonidos de animales, las letras y los números que ves y oyes.
- Compartiendo las actividades diarias, como comer, jugar al aire libre, leer o ver la televisión.
Reduce el tiempo frente a las pantallas en la mayor medida posible así se concentran el uno en el otro.
Ya sea que estés fomentando en él el juego imaginativo o leyéndole, el simple hecho de estar juntos ayuda a tu hijo a sentirse más tranquilo y feliz.
Los niños que crecen con un padre que participa tienen un 60 % menos de probabilidades de ser suspendidos o expulsados de la escuela.
Tiempo para jugar
Los niños aprenden cuando juegan. Los papás suelen tener un estilo de juego diferente del de las mamás, ¡y eso está bien!
Los papás tienden a fomentar un juego más físico, que les enseña a los niños a hacer lo siguiente:
- Controlar los sentimientos de enojo.
- Fomentar la competencia y los riesgos.
- Manejar el contacto físico y controlar las emociones al mismo tiempo.
Ser activo con tu hijo ayuda a que sus huesos crezcan más fuertes y a que sus músculos y su cerebro se desarrollen.
Las siguientes son algunas actividades divertidas que puedes hacer con tu hijo:
- Juega juegos activos como escondidas, encantados, “Simón dice” o una carrera.
- Vayan juntos a andar en bicicleta.
- Practiquen lanzar o patear pelotas.
- Vayan al parque y jueguen en el área de juegos.
- Los niños necesitan 60 minutos de juego activo cada día.
Comamos
Alimentar a los niños pequeños es un trabajo pesado. Estar presente en la mesa para cenar es fácil. Tener a papá presente a la hora de las comidas es importante para un niño.
La hora de la comida es un excelente momento para conocer más a tu hijo. Pregunta a tu hijo sobre su día y sus amigos, y sobre cómo se siente. Esto muestra a tu hijo que te preocupas por él y que es digno de tu tiempo y atención.
Las siguientes son algunas cosas que puedes hacer para crear recuerdos a la hora de las comidas.
- Coman en familia.
- Pide a los niños que ayuden. Pueden lavar, medir, agregar y mezclar ingredientes.
- Sé un modelo para seguir. Come los mismos alimentos saludables que le das a tu hijo.
- Cambia la ubicación de las comidas comiendo fuera, haciendo un pícnic o incluso alrededor de una mesa de centro con cojines en lugar de sillas.
- Mantén las pantallas apagadas y fuera del alcance para fomentar una mayor conversación a la hora de la comida.
Cuando los padres están presentes o participan, los niños tienen dos
2Xveces menos riesgos de desarrollar obesidad.
Protege esos nuevos y relucientes dientes
La salud dental es igual de importante que la salud física. Participa activamente para mantener sanos los dientes de tu hijo.
- Cepíllale los dientes dos veces al día (incluso si solo tiene 1 o 2 dientes). Pregunta al proveedor de atención médica o al dentista de tu hijo qué tipo de pasta dental puede usar.
- Implementa una rutina para empezar y terminar el día en la que tú y tu hijo se cepillen juntos los dientes. Esto puede ser divertido para tu hijo y le permite ver cómo cepillarse los dientes correctamente.
- Dale únicamente agua entre las comidas y los refrigerios. Tu hijo no necesita bebidas azucaradas, como los refrescos y el Kool-Aid. Limita la cantidad de jugo que bebe tu hijo diariamente.
Salud y seguridad
Una vez que un niño empieza a moverse, parece que nunca se detendrá. Tu hijo aprende a hacer más cosas día a día. Esto significa que es posible que debas esforzarte cada vez más para mantenerlo seguro.
- Dile a tu hijo que use un casco de seguridad cuando empiece a andar en bicicleta o en monopatín. ¡Da el ejemplo y usa casco también!
- Siempre mantente cerca de tu hijo cuando esté en el agua o cerca de ella, como en la bañera, la alberca o un lago.
- Asegúrate de que tu hijo esté al día con todas las vacunas recomendadas. Llama a su proveedor de atención médica si no estás seguro de qué vacunas necesita tu hijo.
Vigila a tu hijo de cerca para mantenerlo seguro cuando esté cerca del agua.
Asientos para automóvil
La American Academy of Pediatrics recomienda que los asientos para automóvil solo se usen con propósitos de viaje. Se recomienda quitar al niño de su asiento para automóvil una vez que lleguen a su destino, especialmente si el niño está dormido.
- Usa un asiento para automóvil en cada viaje, sin importar que sea corto.
- Usa un asiento para automóvil según la estatura y la edad de tu hijo. Normalmente, esa información se encuentra en el asiento.
- Conforme tu hijo crezca, los ajustes, la posición y el tipo de asiento para automóvil deberán cambiar.
- Aprende a instalar el asiento para automóvil correctamente. Coloca las correas adecuadamente a tu bebé o niño.
– Las correas deben estar bien ajustadas.
– El broche deslizante debe estar a nivel de la axila.
– El asiento para automóvil debe moverse muy poco al empujarlo de lado a lado.
Para obtener más información de la seguridad de los asientos para automóvil, visita:
Siempre mantén a tu hijo en un asiento para automóvil orientado hacia atrás hasta que tenga al menos 2 años. No te apresures a cambiar a un asiento para automóvil orientado hacia delante o a un asiento elevado, ni siquiera si tienes un hijo de tamaño grande.
Nunca debes sentar a los niños frente a un airbag. Los airbags pueden matar a los niños pequeños que viajan en el asiento delantero. Nunca coloques un asiento para automóvil con vista hacia atrás frente a un airbag.
Recursos sobre paternidad
National
National Fatherhood Initiative
National Responsible Fatherhood Clearinghouse (Centro Nacional de Información para la Paternidad Responsable)
Consulta programas de iniciativas sobre paternidad en tu programa Head Start local o en tu sistema escolar.
